Botrytis ( Botrytis cinerea Pers. )
También llamado moho gris.
Entre las hortalizas que afecta se encuentran:
Brócoli, coliflor, lechuga, repollo, acelga,
calabacín, apio, cebolla, arveja, pimentón, alcachofa, tomate
de mesa, entre otras.
En una de las enfermedades más comunes y más distribuida
en diferentes especies de hortalizas. Bajo condiciones de alta
humedad y baja temperatura, produce una capa fructífera
conformada por las estructuras del hongo (conifióforos y
conidias), que forman un moho de color gris sobre los tejidos
afectados, de ahí su nombre común.
Síntomas
El hongo afecta principalmente las flores y causa pudrición
en los frutos, también puede causar la pudrición de cogollos
y tallos, manchas foliares o tizones, pudriciones de bulbo
y de raíz. El moho gris es un problema en las hortalizas en
almacenamiento y en envío, ya que el hongo es capaz de
desarrollarse a temperaturas cercanas a 0ºC. Con algunas
excepciones, Botrytis, principalmente, ataca a los tejidos tiernos
de los pétalos de flores, brotes, o plántulas, debilitado
y/o provocando el envejecimiento (senescencia) de estos,
figuras. (Babadoost, 2000).
Los primeros síntomas son manchas cloróticas en hojas, flores,
frutos, tallos y semillas; en tallos, hojas y frutos pueden
aparecen manchas irregulares de color marrón, que se extienden
con gran rapidez y al cabo de 1 a 3 días, aparecen
capas fructíferas del moho.
Diseminación
El hongo puede invernar como micelio y como esclerocios
(estructuras de resistencia) en el suelo y los residuos de cosecha,
incluso también en la semilla. Para su desarrollo necesita de condiciones de alta humedad libre, para la germinación
requiere de temperaturas entre 15 y 25ºC, pero la infección,
el crecimiento y la esporulación del hongo se puede dar con
temperaturas entre 0 y 35ºC.
Las conidias son diseminadas por corrientes de aire húmedo,
salpicadura de agua lluvia, herramientas, personas, entre
otros. Generalmente la infección se da lugar por la penetración
de heridas.
Los esclerocios tienen viabilidad en un rango de temperatura
de 4 a 54ºC, generalmente dan lugar a conidias, ocasionalmente
a hifas que pueden penetrar directamente y pueden
producir apotecios (estructuras de reproducción sexual) que
producen ascosporas, también infectivas (Babadoost, 2000).
Manejo
Entre las prácticas de manejo integrado para esta enfermedad
están:
• Utilizar semillas certificadas.
• Evitar la siembra en suelos pesados, la fertilización excesiva
y el uso de coberturas húmedas.
• Eliminar plantas muertas y residuos se cosecha.
• Utilizar eficientemente el riego.
• Evitar el exceso de humedad mediante la construcción de
canales y drenajes.
• Establecer densidades de siembra que permitan la circulación
de aire.
• Evitar realizar heridas (sitios de entrada del hongo), en las
labores culturales y en la cosecha.
• Recurrir a la aplicación de productos biológicos o químicos
de forma oportuna.
• Cosechar de forma oportuna.
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